“Bienaventurados” surge en la Parroquia de Nuestra Señora de las Angustias de la localidad granadina de Motril, para acompañar a enfermos a los centros de salud o hacerles la compra en el supermercado.
Esta iniciativa formada por un grupo de voluntarios dedicados a ayudar a las personas mayores y enfermas que no pueden desplazarse al Hospital o a sus Centros de Salud.
Los voluntarios ofrecen su tiempo y disponibilidad para desplazar en sus propios vehículos a estas personas mayores, vulnerables o con factor de riesgo, hasta los Centros de Salud o los Hospitales. También les ayudan a hacer la compra, con la lista que les faciliten y entregársela en el propio domicilio. Todo, con el criterio de la caridad, es decir, con el criterio de darse a los demás atendiendo las necesidades de la otra persona, también en estos gestos del día a día. Y cumpliendo con las medidas de seguridad establecidas de prevención del covid-19.
El grupo de voluntarios también acerca la Iglesia a los hogares, llevando la Comunión junto con los ministros extraordinarios de la comunión. “Ya que ellos no pueden acudir a la Iglesia, que sea la Iglesia la que acuda a sus casas y puedan recibir la Comunión”, explica Jesús Ortega, joven voluntario e impulsor de esta iniciativa, junto con su párroco Alberto Sedano.
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